¿Por qué vibra el volante a cierta velocidad? 8 posibles razones

¿Alguna vez has sentido una vibración del volante extraña mientras vas conduciendo? Usualmente, es un fenómeno que ocurre cuando llevas una velocidad de más de 80 km/h, cuando es indispensable que el vehículo responda correctamente a las acciones del conductor por seguridad.

Si esto te ha pasado, quédate a leer porque a continuación en el blog de Veinte07 te contaremos las ocho posibles causas por las que vibra el volante mientras conduces.

1.     Neumáticos en mal estado

La causa más común de que el coche vibre cuando alcanza una velocidad de 89 km/h o más es una falla en los neumáticos. También es una de las causas más peligrosas ya que los neumáticos endurecidos por el uso, desgastados o con defectos pueden provocar desde desequilibrios debido a la deformación de la llanta, hasta la pérdida de control del vehículo.

Afortunadamente, si es que se puede usar esta palabra, los defectos en los neumáticos son percibidos porque el volante comienza a vibrar, aunque vaya a velocidades desde los 10 km/h, lo que reduce significativamente los riesgos de seguridad y da tiempo de detenerse a reemplazar la llanta.

No obstante, no debes confiarte ya que un neumático mal equilibrado no siempre se percibe rápidamente, ya sea que esta situación se haya dado por una instalación inadecuada o porque la llanta se deformó después de haber recibido un golpe. La recomendación es estar alerta en todo momento al conducir y detenerte en caso de que percibas que algo raro sucede con las llantas.

2.     Dirección mal alineada

Si la dirección del vehículo no está correctamente alineada, o los componentes de la suspensión no ajustan perfectamente, los neumáticos sufren un desgaste prematuro, aunque no necesariamente es visible ya que pueden estar descuadrados. En este caso, el volante vibra o tiembla al conducir a más de 80 Km/h, incluso es probable que se perciba la vibración en todo el coche, debido a la suspensión.

Además de la vibración, otro signo asociado a esta problemática es que aumenta el consumo de combustible debido al esfuerzo excesivo que deben hacer los engranajes para hacerlo funcionar.

3.     Amortiguadores desgastados o defectuosos

Además de los problemas con los elementos de la suspensión, si los amortiguadores están dañados, desgastados o defectuosos, pueden provocar una vibración que suba hacia el volante. Esta es una situación muy peligrosa ya que las oscilaciones pueden ser muy intensas y provocar que el conductor pierda el control, que se salga de la carretera o choque porque reduce la eficacia en el frenado.

4.     Holgura o desgaste en los silentblocks

Los silentblocks son componentes que, como su nombre permite intuir, tienen la función de absorber el ruido y las vibraciones de los componentes metálicos del vehículo para evitar el desgaste. Cuando los silentblocks se sienten holgados dejan de cumplir con su función, por lo que ya no evitan que se perciban las vibraciones en el volante.

Aunque el desgaste u holgura de los silentblocks no se relaciona con un problema grave de seguridad, sí puede ser molesto y desencadenar otros problemas durante la conducción.

5.     Problemas con el motor

Los motores también pueden causar vibraciones en el volante, especialmente al conducir a una velocidad continua. Esto puede deberse a que falta aire o combustible en los cilindros durante la propulsión, o incluso a una falla en las bujías.

6.     Daño en los discos de freno

Los discos de los frenos deben estar totalmente planos, de lo contrario, si están alabeados el conductor podría percibir vibración al conducir a cierta velocidad, dependiendo del nivel de alabeo que presenten, lo que influye en la sensación de vibración.

7.     Rodamientos dañados, defectuosos o en mal estado

Los rodamientos son clave en la sensación de vibración en el volante durante la marcha, y si bien es una avería fácil de solucionar, suele ser difícil de detectar ya que no se manifiesta con ruido extremo ni de forma sistemática. Es necesaria una revisión completa y exhaustiva de vehículo para detectar los daños en los rodamientos.

8.     Desgaste en las juntas homocinéticas

Las juntas homocinéticas son componentes clave en la transmisión del movimiento pues su misión es transmitir la rotación de un eje de entrada a uno de salida. En caso de desgaste, puede haber vibraciones al circular, las cuales se acompañan por ruidos metálicos, especialmente al iniciar la marcha, conducir a baja velocidad o dar giros muy pronunciados.

¿Qué pasa si no se reparan estas averías?

Cualquiera que sea la causa de la vibración del volante, ya sea alguna de las mencionadas u otra, las vibraciones prolongadas pueden afectar al sistema de dirección y a los neumáticos. Estos daños van más allá de la simple incomodidad al conducir y convertirse en graves riesgos de seguridad ya que el vehículo pierde su capacidad para adherirse al concreto.

Por ello, si percibes vibraciones en el volante debes acudir de inmediato con tu mecánico para que una pequeña e inofensiva avería no se convierta en otra grande, peligrosa y costosa de reparar.

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